Cuando llega el invierno y las temperaturas bajan, lo más común es no utilizar la piscina. Pero, ¿qué hacer entonces con ella? En estos casos, taparla se convierte en la mejor opción. Pero, ¿merece la pena la inversión?, ¿las cubiertas para piscinas qué precios tienen?. Te contamos por qué estos cobertores son el mejor complemento para cuidar de tu piscina. ¡Descubre todas sus ventajas!
¿Por qué tapar la piscina en invierno?
Cuanto menos sucia esté el agua, más fácil será dejarla impecable para la temporada de baño. Y en esto tiene mucho que ver la cubierta para piscinas. Pero esta no es la única ventaja.
- Ahorro económico: Tapar la piscina reduce el gasto en productos químicos que hace falta para mantener el agua en buenas condiciones. Además, una cubierta elimina la evaporación si se utiliza cuando la piscina no está en uso, por lo que la cantidad de agua se conservará de un año a otro.
- Reducción de daños: La cubierta permite que no se acumulen hojas y maleza en la piscina, lo que evita desperfectos o incidencias que éstas pudieran provocar. Además, esto significa que también habrá menos materia orgánica en el agua manteniéndola limpia y disminuyendo la carga de sus filtros y bombas. Asimismo, al no haber hojas en el agua se evitan también obstrucciones que reduzcan la eficiencia de los filtros, alargando su vida útil.
- Mayor seguridad: Una piscina cubierta previene accidentes, evitando que tanto niños como mascotas puedan caer al agua. Son una barrera muy resistente por su grosor y firmeza.
- Aumento de la temperatura: Las cubiertas son ideales para piscinas climatizadas, ya que retienen el calor del agua, lo que se traduce en un ahorro energético significativo al no requerir tanto calentamiento.
Tipos de cubiertas de piscinas
Mantener una piscina limpia requiere de un trabajo perióico. Y aunque hay una serie de pasos que deben hacerse sí o sí, las cubiertas ayudan de forma importante en esta tarea.
Te contamos cuáles son algunas de las cubiertas que puedes encontrar en el mercado.
- De invierno: Son más resistentes y duras para aguantar las bajas temperaturas, el viento y la lluvia. Están diseñadas para preservar el estado de la piscina durante la temporada más fría del año, ahorrar energía y reducir el mantenimiento.
- De verano: Evitan que el agua se evapore fácilmente y ayudan a que mantenga su temperatura.
- Enrollables: Cuentan con un sistema que permite que se enrollen y desenrollen en sí mismas, por lo que son muy cómodas de quitar y poner. Suelen ser manuales, pero también existen con mando a distancia para que se activen fácilmente.
- Retráctiles: Son persianas para piscinas que se activan manualmente o mediante un botón situado en el enrollador. Suelen ser de PVC o policarbonato. Es muy práctico para limpiar y para su utilización.
- De madera: Estas cubiertas están formadas por una o dos planchas de madera que se deslizan por unos railes. Si cerramos la piscina con esta cubierta, podemos pisar sobre ella como si de un suelo se tratase. Son muy cómodas, seguras, y si queremos bañarnos, solamente tenemos que deslizar las maderas.
- Portátiles: Ya vienen prediseñadas para cada tipo de piscina, las hay redondas, rectangulares, cuadradas … Cada fabricante suele tener las suyas.
Recomendaciones para utilizar la cubierta de la piscina
Las cubiertas para piscinas no sólo se utilizan en invierno y los meses fríos, sino que también pueden ser de utilidad en verano. De hecho, si no vas a utilizarla durante más de 4 días, lo más recomendable es poner la cubierta para evitar que el agua se llene de suciedad y se evapore.
Respecto a la cubierta de invierno, para ayudar a que ésta impida que el agua se congele, se recomienda echar también unos bidones de arena a la mitad y echarlos a la piscina. Los bidones quedarán semihundidos y evitarán que se formen placas de hielo.
Igualmente, es importante cambiar los tensores de la piscina si están sueltos. De esta forma la cubierta de la piscina será más resistente y soportará las condiciones climatológicas.
Cubiertas para piscinas: los precios
En el mercado puedes encontrar un amplio catálogo de cubiertas para piscinas a precios de todo tipo. Y es que su precio puede variar mucho, desde apenas 100€ a los miles de euros.
Algunos de los factores que influyen en el precio son los siguientes:
- El tamaño de la piscina: A medida que aumenta el tamaño de la piscina, se incrementa también el precio de la cubierta. Dependiendo del modelo de piscina para el que sea la cubierta, tendrá un precio u otro.
- El material: Las cubiertas pueden estar fabricadas con diversos materiales, como PVC, aluminio o madera. La elección del material no sólo afecta la durabilidad, sino también al precio.
- La instalación: La complejidad de la instalación afecta al precio. Por ejemplo, las cubiertas con sistemas automáticos requieren de más trabajo y, por tanto, son más caras.
- La calidad: Optar por un producto de calidad se traduce en un mayor precio, pero asegura durabilidad y rendimiento a largo plazo, convirtiéndose en una inversión valiosa.
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